sábado, 17 de septiembre de 2011

Diez mil visitas

No sé si es suficiente motivo para abrir una nueva entrada, particularmente después de casi tres meses del último artículo, pero los números redondos siempre son razón justificada para celebrar el éxito de un proyecto.

El blog de "El Corazón del León" ha ido evolucionando a lo largo de estos tres largos años de vida de la crítica más hiriente a la neutra exposición de motivos. Nació como "terapia personal" ante la hijoputez que me rodeaba, y ha ido moderándose con el tiempo, sin perder personalidad, pero dejando bastante acidez y mala leche por el camino.

Bien es cierto que un número considerable de esas diez mil visitas la forman hombrecillos que no quieren saber nada de mí (pero no pueden evitar la tentación de husmear en las paridas del vil Vilaseca), y, a la par, amigos y conocidos que, a su manera, disfrutan de mi forma de ver la vida, o quizá de contarla. Para todos ellos, y para los que no son ni los unos ni los otros, mi brindis.

Un brindis y una disculpa por haber abandonado, en cierto modo, el blog a su suerte. No es por falta de ganas, sino de tiempo. Quien me conozca (y quien no, aquí estoy para ponerlo al día), sabrá que este año ha supuesto para mí una nueva paternidad, un cambio de sección en mi trabajo, un nuevo curso en mi segunda carrera universitaria, muchos pasos adelante en la Asociación Lúdica de la que soy secretario, y un par de nuevas novelas (una de las cuales, Gladius Hispaniensis, alcanzó el rango de finalista en la VII Edición del Certamen de Novela Histórica Ciudad de Valeria, lo que siempre es un logro). Por ello precisamente que aquellos artículos semanales han pasado a convertirse en trimestrales.

Ojalá pueda robarme un poco de tiempo para dedicarle a este espacio que tantos buenos momentos me ha proporcionado... a pesar de que a alguno le hayan pitado los oídos mientras le daba al fatídico botón de Publicar entrada.

Un cordial saludo

JOSÉ VILASECA

martes, 7 de junio de 2011

No diga miedo, diga INSIDIOUS


Aviso que habrá spoilers...


Llevaba tiempo en el disco duro esta peli, sobre todo porque el trailer prometía desde que lo vi, meses ha, en la web imprescindible para el terrorfílico (Upcoming Horror Movies) y, al echarle un vistazo para ver si estaba bien grabada, me pegué un par de sustos "de los míos" (sorpresitas, golpes de sonido... lo normal, pero queriendo verla a las dos de la madrugada, tampoco era plan).

A lo que vamos, hace unos días finalmente la vi. Creo que es una buena película de terror, pero una película mediocre en general. ¿Cómo se explica esto? Pues que asusta, que te mantiene en tensión, pero que técnicamente es mejorable, que los diálogos son los "siempre escuchados" y tampoco inventa nada.

Como resumen - homenaje de muchas películas de miedo funciona perfectamente: Por lo pronto, yo vi restos de POLTERGEIST (sobre todo), EL EXORCISTA (un poco menos), EL SEXTO SENTIDO (hay planos casi calcados), PARANORMAL ACTIVITY (la historia misma) y reúne elementos más que trillados en el cine de cague: Niños pequeños, demonios, cosas que aparecen en los armarios o debajo de la cama, puertas que se abren y cierran, fotografías trucadas, escaleras, sótanos y altillos, música malrollera y ruidos cuando toca.

Como la vi original subitulada, hay cosas que no llegué a entender bien: ¿quién es exactamente el tipo de la cara roja? ¿y la familia asesinada? ¿la vieja vestida de novia? ¿el tipo oscuro y desfigurado que lame la cara de la madre? ¿la vieja con voz de cría que corre por la casa? ¿por qué aparecen, en principio, tres niños y luego se "olvidan" del tercero?

Personalmente me gustó, y seguramente más de uno arrimará la cebolleta a la parienta en su cine más cercano, pues es de esta donde la gente chilla en el cine y las mozas se encogen al lado del maromo. Pero seguramente hubiera sido mejor si no plagiar... digoooo, "homenajeara" a tantos clásicos, y hubiera tratado de ir "más allá". Aún así, echadle un vistazo a ver qué os parece.

Un abrazo

viernes, 15 de abril de 2011

Roxette vuelve a la carretera...

Roxette, ese grupo sueco del que nadie parece ser fan, pero prácticamente todo el mundo conoce, ha vuelto. En realidad, nunca se había ido del todo, pero la delicada salud de Marie, su cantante femenina, nos había dejado sin giras mundiales ni álbumes de estudio de este dúo escandinavo desde hace casi una década.

Para mí, que soy seguidor de Per y Marie desde que sacaron Look Sharp allá por el 87, y que evoca en mi memoria grandes momentos de mi adolescencia (como esas cintas de casette grabadas directamente de la radio, esas amistades en el Instituto, esos primeros amores...), es una gran noticia.

Supongo que hoy podría hablar de lo mucho que significa este grupo para mi "memoria musical", o la ilusión que me provoca poder acudir a una actuación en directo (seguramente en Madrid, allá por noviembre), pero hoy voy a desgranar, canción por canción, pista a pista, lo que nos depara su último album, Charm School

1.- WAY OUT
La primera canción de cada disco de la pareja sueca ha sido una auténtica declaración de intenciones, un anticipo de lo que nos espera. The Look o Joyride son ejemplos perfectos de lo que trato de decir: Un intento de poner el listón lo más alto posible, recordando que Roxette no es un grupo de dos canciones por disco, sino que suele dar para bastante más.

Way out nos recuerda, en cierta manera, a Harleys & Indians de Crash! Boom! Bang!, con mucho sonido de guitarra, pero un ritmo que evoca en cierta forma a los indios americanos (y unos toques de piano, apenas quince segundos, que sirven para traernos a la mente lo mejor de la banda, sus baladas).

2.- NO ONE MAKES IT ON HER OWN
Y precisamente son esas baladas las que, en este disco, mejor paradas quedan en la comparativa global. En la pista dos, como en la tan añorada Listen to your heart, la voz de Marie y el piano nos acunan, hasta que entra la batería, la guitarra, el bajo, los coros... Tiene un "algo" de rezo, algo de himno religioso, con ese dejà vú que sentimos en el paladar cada vez que degustamos, cada vez que escuchamos una nueva canción de este grupo. Brillante.

3.- SHE'S GOT NOTHING ON (BUT THE RADIO)
La canción con que se presentaban en sociedad, de nuevo, es un ejemplo perfecto de "canción discotequera pero menos", que en su día ya intentaron con Crush on you, pero que es este ejemplo resulta más fresca y menos estruendosa.

Personalmente, aún habiendo sido elegida como "avanzadilla" del resto del album, no es mi canción preferida, pero sigue siendo "sonido Roxette" en estado puro.

4.- SPEAK TO ME
De nuevo, una balada. Si algo podemos comprobar es que, de las doce pistas, hay un balance perfecto entre pop-rock divertido y más o menos cañero, y canciones pastel.

Y Speak to me es un pastel que empieza suave, como un susurro... y que crece con la voz de Marie. Una auténtica canción de enamorados, tanto por lo que dice (háblame dúlcemente, háblame con ternura, háblame en soledad...), sino por cómo lo dice (y ese ¿dónde te escondes, cuando estás sólo? pone el vello como escarpias, amigos...)

5.- I'M GLAD YO CALLED
Salvo honrosas excepciones (como toda la "cara B" de The Look), cuando Roxette coloca dos baladas juntas, una tiende a ser bastante más floja que la anterior, y este es uno de esos casos. Personalmente, creo que el registro de voz de Marie no se aprovecha y que las reminiscencias de Wish I could fly marcan una balada, para mi gusto, demasiado lenta y grave.

6.- ONLY WHEN I DREAM
Una nueva demostración de que Roxette son únicos para colocar sobre la mesa una canción que habla de "cosas bonitas", dándole un ritmo bastante superior al de muchas baladas noñas a las que nos tienen acostumbrandos otros grupúsculos; Mejor Marie en contrapunto con Per, y un gran estribillo.

7.- DREAM ON
Después de veinte años "en la carretera", que Roxette son herederos del "sonido Beatle" o el "sonido garaje" en alguna de sus composiciones, es más que evidente. En este album, Dream On y After All son dos ejemplos perfectos, que acaban sonando como un She loves you del siglo XXI. Para mi gusto, mejor After All, más divertida seguro, pero Dream On es muy disfrutable.

8.- BIG BLACK CADILLAC
Para mí, la mejor del album, con cierta diferencia. Con esos toques de fondo y esos cambios de registro que ya "patentaron" con The Big L. (Joyride), canción rockera al máximo, no sólo por el ritmo sino por todo lo que la envuelve.

Una canción que se sigue con los pies, que se sigue chasqueando los dedos, que puede subirse de volumen y servir como canción de discoteca (como ya hicieron con Sleeping in my car). Es curioso el idilio que tiene Roxette con las "canciones de coche" bien paridas...

9.- ON MY OWN WAY
Una canción preciosa que, como I'm Glad your called, adolece de un ritmo demasiado pausado al comienzo. Sin embargo, cuando Marie da su golpe de timón y comienza con el segundo estribillo, nos damos cuenta de que estamos frente a una balada cojonuda, que podría ser perfecta si mantuviera el mismo ritmo a lo largo de toda su extensión.

10.- AFTER ALL
Roxette son maestros en las "canciones intrascendentes", esas "caras B" que abundan en sus albumes y que, sin tener la suerte de sus "hermanas mayores", demuestran su calidad como banda y consiguen que, de vez en cuando, en vez de tararear alguno de sus éxitos, te sorprendas rememorando un After all, un June afternoon u otras similares.

Por no hablar del llamado "sonido Beatle", que salta al oído con ese "cool champán" que Per pronuncia justo antes del segundo estribillo.

11 / 12.- HAPPY ON THE OUTSIDE / SITTING ON THE TOP OF THE WORLD
Si alguna colleja hay que repartir al magnífico dúo, es que desde The look, no han sabido terminar bien sus álbumes... Joyride termina con Perfect Day, salvada por los pelos por la magnífica voz de Marie, lo que ocurre exactamente igual con el Queen of Rain de Tourism y, de ahí, de mal en peor: la canción de cuna Go to sleep en C!B!B!, los maullidos de gato en Beautiful things de Have a nice day, la flojita My wolrd, my love, my life... Vamos creo que se me entiende fácil

Esta no ha sido una excepción: La calidad de los dos últimos cortes es considerablemente inferior, en mi humilde opinión, que el resto de las canciones.

Sin embargo, la dinámica del disco nos ha debido llevar a un buen final, con un gran sabor de boca. Disfrútenlos, porque estas perlas de pasión que nos regalan de vez en cuando tardan en volver a degustarse...

martes, 12 de abril de 2011

Con la Iglesia hemos topado...

Sale en La Noria, en CUATRO, en el Levante... Si no lo has visto, si nadie te lo ha comentado, eso que te llevas por delante. Pero en mi querido barrio del Cabanyal ha sido la comidilla de los paisanos desde hace semana y media: Un sacerdote (vulgo "cura"), se ha negado a dar la comunión a una feligresa porque convive con otra señora y, se supone, hacen sus cositas lésbicas y viven en pecado.

La "intrahistoria", que siempre sirve para conocer un poco mejor el percal, nos cuenta que el sacerdote es fiel paladín de la comunidad familiar neocatecumenal (es decir, "kiko"), que no le importa levantarse a las siete de la mañana para hacer misas exclusivas para las FAMILIAS con mayúsculas (es decir, las parejas que fornican a condón quitado y se permiten el lujo de tener chorrocientos cachorros al grito de "Dios proveerá"), y que no "descubrió" la vida pecaminosa de la mujer, sino que uno de sus bienamados feligreses le amenazó con acudir al Arzobispado si osaba colocarle en la boca la hostia bendita a la vil pecadora. Y, para rematar la faena, que en lugar de acudir directamente a hablar con la mujer y explicarle el brete en el que le acababa de colocar aquel fariseo, empleó al Hermano Mayor de la Hermandad semanasantera a la que pertenecían ésta mujer y tres sodomitas más para procurar imitar a Pilatos y lavarse las manos en este espinoso asunto.

A partir de aquí, el dislate. El sacerdote no quiere hacer declaraciones y se escuda en el siempre socorrido derecho canónico, mientras que la ofendida recurre al amarillismo, con lo que nos encontramos más o menos lo de siempre: Un cura carca de mentalidad medieval, una libertina con ganas de aprovechar sus quince minutos de gloria apelando a la fe, y la caterva de inquisidores y librepensadores que afilan los cuchillos, pescando en río revuelto.

Todo me la traería un poco al fresco, de no ser porque la iglesia donde se negó la comunión a la feligresa es, justamente, donde comulgué, me confirmé o bauticé a mi hijo (mientras yo estaba en pecado mortal, todo sea dicho de paso, porque mi mujer y yo lo encargamos en su día, mediante uso y disfrute de mi poderoso báculo del amor, sin haber contraído matrimonio). La, perdón por la expresión, paja mental del sacerdote me sería indiferente si no fuera porque lo conozco, lo veo casi a diario, y es la "cabeza pensante" del colegio donde llevo a mi hijo. Y aunque no tengo trato con la ofendida, puedo empatizar con ella porque otros a los que conozco, pecadores y semanasanteros a un tiempo, pueden pasar por su mismo trance, llegado el caso, bien por haberse divorciado, bien por tener hijos sin casarse, o bien, como es este caso, por caer en las tentaciones de Lesbos o Sodoma, vaya.

Como tampoco es que me apetezca exponerme a un "monitum" y que, a partir de ahora, me den la hostia de canto cuando vaya a comulgar (a pesar de que hace veinte años que no cato la sagrada forma, conciencia sucia la mía...), procuraré dar mi opinión comedida y que cada uno piense lo que quiera, recordando que lo anteriormente escrito estaba envuelto de un aura de ironía puramente literaria (lo aclaro para evitar talibanismo, "molinetismo" o simple estupidez...)

En primer lugar, creo que este tipo de anécdotas son las que alejan a la feligresía de la Santa Madre Iglesia, o las que justifican que muchos "no cristianos" carguen con rabia (y, por desgracia, a veces también con razón), contra el extraño dogmatismo de una Iglesia que condena la homosexualidad, el uso de métodos anticonceptivos o la investigación con células madre pero que soslaya la pederastia o la avaricia desmedida de alguno de sus ministros.

No voy a caer en la demagogia idiota de afirmar aquello de "si se vendieran las obras del Vaticano, se daría de comer a tantísima gente", quizá porque conozco lo que SÍ hace la Iglesia gracias a entidades como Cáritas, la Casa Cuna Santa Isabel o la Casa de la Caridad, que también me pillan bastante cerca. Sin embargo, es cierto que para muchas cosas, la Curia romana y el resto de los siervos de San Pedro se han anclado en el siglo XV y ahí viven la mar de felices, incapaces de entender no sólo que el mundo cambia, sino que ya pocos nos creemos lo de la infalibilidad papal, cuando el portador de las sandalias del pescador es un señor que se parece al Emperador Palpatine de "La Guerra de las Galaxias" y su nombre da tantísimo juego con Mazinguer Z (por no hablar de su pasado frente a un antitanque nazi...)

Pero también me entristece, para qué nos vamos a engañar, que se saque rédito en la caja tonta, en prensa o en radio, de un patinazo sacerdotal que, quizá, podía haberse resuelto de otro modo. Y digo esto porque, en la calle, en el barrio, había una clara conciencia de quién era el culpable y quién era la víctima en esta situación, y la voluntad de los fieles era alejarse de un cura que, en cualquier momento, podía hacerle el mismo "feo" a casi cualquiera de nosotros (lo que significaba acabar comulgando en CUALQUIER iglesia del barrio, salvo en ésta); pero ahora, con dos posiciones tan radicalizadas, uno no sabe quién tiene realmente razón, quien erra, o si al final de todo no se ha acabado consiguiendo lo que se buscaba desde un principio...

JOSÉ VILASECA